El informe Mapping Spain's Tech Sector, elaborado por Endeavor Insight y que habla de las nuevas 11 empresas ‘unicornio’ en España, revela que en los últimos cinco años el porcentaje de empresas tecnológicas con al menos una mujer entre sus fundadores se redujo 4 puntos, pasando del 17 % (entre 2012 y 2016) al 13 %.
Si diferenciamos por sectores, vemos que la presencia femenina no es igualitaria. En los últimos años hubo varias fundadoras de proyectos de e-commerce, salud y viajes, pero fueron menos las que apostaron por los sectores de adtech (tecnología publicitaria), gaming y aplicaciones móviles o edtech (tecnología para la educación).
Andrea Barber, fundadora del software de energías renovables RatedPower, dice que “todavía queda un largo camino para la total integración de las mujeres en el emprendimiento tecnológico, por motivos educativos y culturales. Los estereotipos y roles de género están muy arraigados y esto, combinado con la falta de apoyos, hace que las mujeres se vean desalentadas para emprender. Otro problema importante es que nosotras todavía tenemos muchas dificultades para que financien nuestras ideas”.
Otra de las voces del informe es Sofía Benjumea, directora de Google for Startups en España desde 2015, que opina que “todavía queda mucho por hacer en diversidad e inclusión en el sector tecnológico español. Sin embargo, creo que es un honor ver a líderes en sus industrias, como Andrea Barber (RatedPower), Claudia Gómez (Senniors) o Andrea Cayón (Passporter). El porcentaje es pequeño, pero están dando un ejemplo enorme. Este es uno de los principales valores de Google for Startups y estamos orgullosos de que el 48% de nuestro alumnado sean mujeres”.
Estudios previos de Endeavor Insight sugerían que las dificultades que se encuentran para conseguir financiación y empezar un proyecto tecnológico son un síntoma de los obstáculos para relacionarse con los potenciales inversores, con sus compañeros para fundar proyectos y con los empleados.
A pesar del descenso del número de emprendedoras desde el año 2017, el estudio destaca la importancia de los fondos de capital riesgo fundados por mujeres respecto a otros países del sur de Europa, como es el caso K Fund (Carina Szpilka) y Seaya Ventures (Beatriz González).