La memoria de ICEX España Exportación e Inversiones, correspondiente al año 2018, pone a disposición del lector información relevante sobre la actividad de la entidad, dirigida a fomentar la internacionalización empresarial a través de cuatro grandes ejes: la promoción de la empresa en los mercados exteriores, la inteligencia empresarial para la correcta toma de decisiones, la formación en internacionalización y la atracción a España de inversiones extranjeras.
El ejercicio 2018 ha sido de consolidación del Plan Estratégico 2017-2018, integrado en la Estrategia de Internacionalización de la Economía Española 2017-2027, cuyo principal objetivo es optimizar los mecanismos de impulso de la internacionalización.
En este marco, ICEX ha llevado a cabo diversas acciones prioritarias para el fomento de la internacionalización de las empresas españolas:
- • Apoyo cada vez más adaptado a las necesidades y al perfil de nuestras empresas.
- • Incorporación de la innovación, la tecnología, la marca y la digitalización a la internacionalización.
- • Desarrollo del capital humano para la internacionalización.
- • Mejor aprovechamiento de las oportunidades de negocio derivadas de la política comercial común y de las instituciones financieras y organismos multilaterales.
- • Impulso a la captación y consolidación de la inversión extranjera de alto valor añadido.
- • Refuerzo de la coordinación y complementariedad de las acciones de todos los actores relevantes en materia de internacionalización.
En líneas generales, el sector exterior español viene experimentando una gran transformación en los últimos años, con un número creciente de empresas que exportan regularmente y con una mayor penetración en mercados emergentes. El esfuerzo exportador realizado ha permitido mantener un saldo positivo en la balanza por cuenta corriente, que cerró con un superávit del 0,9% del PIB, con una capacidad de financiación del 1,5% del PIB. Y ello, en un contexto global complejo, marcado por una creciente incertidumbre, derivada de las tensiones comerciales o aspectos como el Brexit o la transformación que se está produciendo en el sector del automóvil.
De esta manera, España suma ya cinco años de crecimiento económico con superávit por cuenta corriente, frente a la dinámica de etapas anteriores cuando la recuperación de la demanda interna interrumpía la consecución de superávits por cuenta corriente. Una excelente señal del cambio estructural producido en el sector exterior español.
Adicionalmente, durante 2018, España continuó siendo un atractivo destino para la inversión extranjera directa, con una inversión bruta recibida superior a los 52.800 millones de euros, el mayor dato desde que se recopila esta estadística, convirtiéndose España en el quinto país receptor de inversión extranjera directa.