En concreto, en la República Checa, el fabricante de automóviles Škoda Auto no puede completar 5000 coches por semana debido a la actual falta de chips. Según publica Business News CTK tiene aproximadamente unos 33 000 coches acumulados sin terminar.
En una entrevista a Hospodářské Noviny, Michael Oeljeklaus, miembro del consejo de administración para la producción y la logística de Škoda Auto, señaló que el fabricante produce unos 21 000 coches semanales, de los cuales entre 3000 y 5000 quedan sin terminar debido a la falta de chips. Le faltan principalmente las unidades de control del ESP para el modelo Octavia y unidades de control de ventanillas para todos los modelos.
A consecuencia de ello, se cancelarán 60 turnos antes de las vacaciones regulares que tiene la empresa de dos semanas para parar la producción por completo durante este periodo.
Škoda Auto tiene tres plantas de producción en Chequia. Se ha confirmado este jueves que la reducción de la producción afectará a las fábricas de Mlada Boleslav, Kvasiny y Vrchlabi. Según los sindicalistas, partes de Mlada Boleslav seguirán operando hasta cierto punto, pero la planta de Kvasiny se detendrá por completo. Según Oeljeklaus, el suministro de chips podría mejorar a finales de año y el mercado podría volver a la normalidad en el primer trimestre.
Con respecto al estado de otras empresas del sector en la República Checa, en el caso de Toyota, la planta checa suspendió la producción durante 14 días en marzo por la falta de chips. La fábrica checa de Hyundai suspenderá la producción durante un día, el 25 de junio, debido a una interrupción del suministro de componentes por parte Yura (contratista tunecino), según informó la empresa.
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