Las fábricas de piensos llevan meses quejándose de la escasez de granos utilizados en la mezcla, como el trigo y el maíz, e instando al Gobierno a suavizar los controles de importación destinados a proteger a los agricultores locales, según ha informado The Bangkok Post.
Rusia y Ucrania representan conjuntamente alrededor del 29 % de las exportaciones mundiales de trigo y el 19 % de las de maíz, pero la invasión de Moscú ha restringido el suministro.
Desde el inicio del conflicto entre ambos países, existe un fuerte desabastecimiento de materias primas a escala global, por lo que ya son varios los países que han optado por restringir las exportaciones. Esta medida busca evitar una fuerte subida del precio de los alimentos en Tailandia, al tiempo que el país se prepara para recibir nuevos turistas con la eliminación de restricciones.
El ministro de Comercio, Jurin Laksanawisit, aseguró en rueda de prensa que una de las medidas propuestas era suspender temporalmente los controles sobre las importaciones de trigo de mayo a julio.