Omán

El Fondo Monetario Internacional (FMI) llevó a cabo una misión virtual en Omán del 17 al 31 de enero de 2021 para analizar la situación actual, políticas y perspectivas económicas del país, en el marco de la revisión del Artículo IV del Convenio Constitutivo del FMI.

Las conclusiones se resumen en cinco apartados principales, según publica el FMI en su página web.

• 1. Desarrollo económico y perspectivas

Las medidas llevadas a cabo por las autoridades omaníes para la contención de la covid-19 durante 2020, tales como el cierre de negocios no esenciales y restricciones a la movilidad, fueron rápidas y eficaces. No obstante, tuvieron un impacto negativo en la economía de Omán en 2020, con una contracción del 6,4 % del PIB y un aumento del déficit por cuenta corriente hasta el 10 % del PIB y del déficit fiscal hasta el 17,3 % del PIB.

Con el objetivo de mejorar la delicada situación presupuestaria del país, el Gobierno realizó importantes reformas a través del aumento de los ingresos no petroleros y de una drástica reducción del gasto público. Entre otras medidas, se ha llevado a cabo la reestructuración y centralización de instituciones gubernamentales, así como la paralización de inversiones y proyectos públicos.

En cuanto a las previsiones, se espera una modesta recuperación del 1,8 % del PIB en 2021, centrando el crecimiento a medio plazo, sujeto en gran parte a la volatilidad de los precios del petróleo.

• 2. Evaluación de las políticas

El FMI reafirma que las medidas gubernamentales a corto plazo deben mantener la prioridad de erradicación del coronavirus. Las políticas públicas deben priorizar los aspectos como la crisis sanitaria, minimizando las pérdidas económicas y los riesgos financieros.

• 3. Refuerzo de la sostenibilidad fiscal

En relación a la sostenibilidad fiscal, las autoridades anunciaron un Plan de Equilibrio Fiscal a medio plazo (2021-2025) con el fin de mejorar la estabilidad presupuestaria del gobierno. El objetivo principal es aumentar los ingresos que no provienen del sector de los hidrocarburos y reducir la rigidez del gasto público.

En esta línea, el presupuesto de 2021 busca una importante consolidación fiscal, con una previsión de reducción del déficit fiscal en 6 puntos porcentuales del PIB, hasta el 7,5 %. La necesidad bruta de financiación se proyecta en un 14,5 % del PIB y se espera que la mayor parte provenga de fuentes externas.

• 4. Salvaguardar la estabilidad financiera

El sistema bancario omaní cuenta con liquidez y con reservas de capital suficientes, no obstante, se enfrenta a consecuencias negativas derivadas de la pandemia, como son una rebaja en la calidad de los activos o una elevada concentración de créditos y depósitos en los balances de las entidades. Sin embargo, las autoridades nacionales consideran que los bancos nacionales podrán mantener un capital adecuado incluso con un empeoramiento de la situación actual.

Por otro lado, se han desarrollado acciones para mitigar el impacto de la pandemia sobre particulares y empresas. Entre ellas, se destacan la concesión de préstamos de emergencia sin intereses, la exención y reducción de impuestos, la flexibilidad para el pago de impuestos a plazos y la creación del Fondo de Seguridad Laboral.

Además, el Banco Central de Omán emitió un paquete de ayudas destinado a suavizar las condiciones financieras que consistía en: 1) la reducción de los tipos de interés; 2) inyecciones de liquidez; 3) el aplazamiento para la devolución de préstamos, y 4) la relajación de los requisitos sobre reservas de capital y coeficientes de liquidez. En este sentido, el FMI recomienda que las medidas llevadas a cabo al respecto, sean estudiadas para que no tengan a su vez un efecto negativo sobre la estabilidad financiera.

• 5. Impulsar el crecimiento potencial

Por último, el FMI asegura que el éxito de la aplicación de las reformas estructurales es primordial para promover la diversificación económica y la creación de empleo para los omaníes. En este sentido, las áreas de reforma, en línea con la Visión Omán 2040, incluyen la reestructuración de la Administración Pública, el fortalecimiento de la gobernanza de las empresas estatales, la mejora de la flexibilidad de los mercados laborales y el fortalecimiento de los mecanismos de reestructuración empresarial.

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