Según una publicación en la web de BID Invest, los fondos contribuyen al plan de mantenimiento de inversiones fijas de la compañía, sus empleos y sus vínculos con el mercado local y regional.
CMI Alimentos es uno de los mayores empleadores de Centroamérica y República Dominicana, con alrededor de 30 000 trabajadores. Los fondos permitirán fortalecer la cadena de valor en dos sentidos: aumentando las compras a los más de 8000 proveedores de la compañía y beneficiando a los microempresarios que integran su principal canal de venta directo que son, en su mayoría, mujeres empresarias.
A través de este proyecto, BID Invest desempeña un rol contracíclico, al proveer financiamiento de largo plazo que permite aliviar los desafíos de seguridad alimentaria, un aspecto clave para la lucha contra la covid-19. CMI Alimentos apoyará el suministro de víveres en los mercados locales (proteína animal, harinas y productos derivados) a pesar de las restricciones operativas, logísticas y laborales.
Además, la operación permite reactivar la generación de ingresos, mediante empleos directos e indirectos, en zonas rurales de Centroamérica, donde viven poblaciones vulnerables y muy afectadas por la emergencia sanitaria y los huracanes.
La financiación está formada por un préstamo de 50 millones de dólares de fondos propios de BID Invest y la movilización de 25 millones de dólares procedentes del Fondo de Cofinanciamiento Chino para América Latina.
La operación de BID Invest incluye la implementación de mejores prácticas ambientales y sociales en las operaciones de la compañía, alineadas a estándares internacionales. También se pondrá en marcha un plan de apoyo con un ángulo de género, dirigido a la cadena de distribución micro de CMI Alimentos en Guatemala. La capacitación cubrirá temas como educación financiera, gestión empresarial, empoderamiento de la mujer y digitalización. Posteriormente, se realizará una evaluación de impacto de la estrategia para valorar su expansión a microempresarios proveedores en otros países.
La operación contribuye potencialmente a tres de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas: Trabajo decente y crecimiento económico (ODS 8), Industria, innovación e infraestructura (ODS 9) y Producción y consumo responsables (ODS 12).