27/07/2021

A pesar de sus efectos, no es el COVID-19 la gran prioridad del Gobierno, sino el proceso de diversificación acelerada de su economía en el que está inmerso el país desde hace varios años.

VÍDEO. Entrevistamos a José-Ramón Ferrandis, consejero económico y comercial de la Embajada de España en Riad

Para Arabia Saudí, las consecuencias de la pandemia del COVID-19 han sido menos graves que en otros países, principalmente por dos razones: la estructura de su economía, con un fuerte componente industrial y de servicios no presenciales cada vez en mayor medida, y el gran esfuerzo de las autoridades financieras, que pusieron en marcha, desde el principio, un amplio esquema de apoyo a particulares y empresas.  

Gracias a ello, la caída del PIB en 2020, aunque importante (un 4,1%), fue menor de lo esperado, si bien a costa de reducir las reservas de divisas, aumentar el endeudamiento, tanto interno como externo, y privatizar parte de sus activos.

Como subraya el hasta ahora consejero económico y comercial de la Embajada de España en Riad, José-Ramón Ferrandis, “en 2021, la vacunación masiva, el control de fronteras, la suspensión parcial del Hajj (peregrinación) y la escasa movilidad interior están manteniendo la incidencia de la enfermedad a niveles aceptables”.

En opinión del consejero, “Arabia Saudí no va a cambiar tras el impacto de la pandemia. Lo lleva haciendo en realidad desde hace varios años, con éxito considerable para sus objetivos. Hay una línea de trabajo que seguirá sin hacer referencia ni experimentar cambios por el impacto del virus”.

Objetivo prioritario: la diversificación económica

El Gobierno saudí está tratando de acelerar la diversificación de la economía, huyendo de la larga y excesiva dependencia del sector petrolífero.

Sin embargo, se encuentra actualmente ante dos circunstancias que están ralentizando en cierta forma el proceso. Debido, entre otros factores, a la bajada de los precios del crudo en 2020, el déficit fiscal se situó el año pasado en el 12% del PIB, mientras la deuda pública alcanzó el 32,5% del PIB, cifras poco habituales en la economía del país.

Para conseguir la reducción paulatina del déficit público, principal objetivo de su política económica, el Gobierno tendrá que recortar subsidios; emitir deuda pública; privatizar activos del Estado; elevar impuestos, tasas y aranceles; y confiar en la inversión, tanto extranjera (IED) como nacional.

Se han identificado varios sectores prioritarios para ambos tipos de inversión, entre ellos: energía, transporte y logística, tecnologías de la información y las comunicaciones, salud, ciencias de la vida, enseñanza y turismo. 

"Visión 2030", un plan a tres lustros vista

En abril de 2016 se aprobó un ambicioso plan de desarrollo llamado "Visión 2030" con un horizonte de tres lustros, estableciéndose 96 objetivos estratégicos que se alcanzarán mediante 13 programas de realización, y con un volumen de inversión total de 3,2 billones de dólares. Se trata de un programa para reducir la dependencia del petróleo, desarrollar el sector privado, incrementar los ingresos fiscales no petrolíferos y aumentar el empleo, incluido el de las mujeres, hasta ahora muy excluidas del mercado laboral. 

Paralelamente a la “Visión 2030”, y como parte de la misma, se anunció también un National Transformation Plan (NTP), que afectará a todos los aspectos de la sociedad. Será un programa de privatización y de reforma económica de amplio alcance para intentar alejar a la economía de Arabia Saudí de su dependencia de las exportaciones de petróleo y del gasto público. Uno de los objetivos consiste en la privatización de 146 entidades propiedad del Estado.

Además, este mismo mes de julio se ha anunciado una nueva iniciativa, también en el marco de la “Visión 2030”: la Estrategia Nacional de Transporte y Logística, que pretende transformar Arabia Saudí en un hub logístico y, de nuevo, reducir la dependencia del crudo. La estrategia incluye el desarrollo de infraestructuras, la creación de plataformas y zonas logísticas, y el fortalecimiento de la cooperación entre los sectores público y privado.

Dentro de las infraestructuras destacan el sector aéreo, el transporte marítimo y el ferrocarril, con unas ingentes inversiones (150.000 millones de dólares), de las cuales el 65% se pretende que sea financiado por la IED.

Dadas las circunstancias que atraviesan las finanzas del país, los analistas muestran cierta cautela sobre la capacidad para poner en marcha todos estos planes y su impacto real.

España se interesa por el mercado saudí

En el área económica, las relaciones entre los dos países son de gran importancia. No hay que olvidar aquí los grandes proyectos llevados a cabo por nuestras empresas en Arabia Saudí, como el tren de alta velocidad entre Medina y La Meca (11 de las 13 compañías del consorcio adjudicatario eran españolas), la construcción de tres de las seis líneas de metro de Riad, o los proyectos en los sectores de agua y energía, que constituyen un éxito permanente para nuestras firmas.

Los intercambios comerciales son tradicionalmente deficitarios para España, con una tasa de cobertura que en 2020 se situó en el 75,7%, la más positiva de los últimos años, pero provocada por la fuerte caída de nuestras importaciones e influida, sin duda, por las restricciones al comercio mundial debido a la pandemia.

Sí conviene destacar que es un mercado difícil, en el que existen importantes barreras para la entrada de productos en distintos sectores y que es necesario conocer con detalle.

Por otra parte, aunque se trata de una economía abierta al exterior, su tasa de apertura comercial no es muy elevada, un 42,1% en 2020, inferior a la registrada en años anteriores, en los que superaba el 50%.

En el capítulo de la IED, aunque los proyectos de inversión tienen derecho, en principio, a los mismos beneficios, incentivos y garantías ofrecidos a los proyectos nacionales, hay que obrar con una gran cautela.

El Gobierno está haciendo esfuerzos para atraer y aumentar la llegada de capital foráneo mediante una mejora de la legislación. Pretende reforzar la seguridad jurídica de las empresas, una mayor aceptación de los arbitrajes internacionales, la mejora de las posibilidades de arbitraje local y tribunales especiales para asuntos comerciales, y contempla considerables ayudas a la implantación y su implicación directa en grandes proyectos.

Sin embargo, el inversor extranjero mantiene cierta prevención ante el marco legal, la enorme burocracia y, sobre todo, ante las expectativas económicas. Otro de los mayores obstáculos se encuentra en el proceso de “saudización”, ya descrito más arriba.

Dicho todo esto, la empresa española, si es capaz de profundizar en el conocimiento del mercado y sus dificultades, tiene margen para el crecimiento a través de una política a muy largo plazo de presencia en Arabia Saudí.

Los sectores de interés son múltiples, pero se podrían destacar especialmente dos: el agua y el turismo. Precisamente, ambos sectores fueron el objetivo principal de un Encuentro Empresarial España-Arabia Saudí, celebrado en formato virtual los pasados 29 y 30 de junio de 2021, y organizado por la Secretaría de Estado de Comercio a través del ICEX.

El apartado ‘Vídeos destacados’, al final de este artículo, incluye los paneles del evento dedicados a los dos sectores destacados, así como la charla coloquio que se celebró sobre la situación actual del mercado saudí. También recoge los enlaces a los dos vídeos sobre agua y turismo realizados por la Ofecomes en Riad con anterioridad al Encuentro Empresarial.

Empresas españolas activas en el país

ACCIONA. El grupo español está presente en el mercado saudí desde hace varios años, en los que ha desarrollado numerosos proyectos. El más reciente consiste en la adjudicación de la planta desaladora de Jubail 3B para la empresa pública Saudi Water Partnership Company (SWCP).

Se trata de la construcción de una planta desaladora por ósmosis inversa con capacidad de 570.000 m³/día para abastecer a dos millones de personas en las ciudades de Riad y Qassim. El proyecto incluirá energía solar propia para reducir el consumo de energía de la red. Para ello, Acciona también construirá una planta solar fotovoltaica.

El contrato EPC (ingeniería, adquisiciones y construcción, por sus siglas en inglés) incluye asimismo la instalación de 58 km de líneas de transmisión eléctrica, la subestación eléctrica y las obras marinas.

La desaladora se ubicará en la costa del Golfo Pérsico, en la ciudad industrial de Jubail, situada al este del país, y su puesta en marcha está prevista para el primer trimestre de 2024.

Otros proyectos de plantas de desalación en el país, unos en marcha y otros ya finalizados, harán que Acciona, una vez concluida Jubail 3B, haya suministrado alrededor de 2,3 millones de m³/día de agua desalada mediante ósmosis inversa en Arabia Saudí, consolidando esta tecnología de desalación como la más eficiente y sostenible con la menor huella de carbono.

José María Ortega, director de Desarrollo para África, Oriente Medio y Asia (AMEA), señala, entre las fortalezas de Acciona en el mercado saudí, “la adaptación de nuestra compañía a las especificidades del mercado local, como por ejemplo el tipo de contratos utilizados por nuestros clientes, los requerimientos ambientales aplicables, los niveles requeridos de ‘saudización’, etc.”.

Añade el directivo que “nuestros proyectos incluyen destacados aspectos en el ámbito de la sostenibilidad y son acabados en tiempo y presupuesto. Y además somos competitivos en precio”.

Acciona está incrementando su presencia local con una oficina en Riad, que se va a ver reforzada en los próximos meses de una forma significativa.

Ortega no oculta, a pesar de todo, las dificultades de un mercado como el saudí. Menciona en primer lugar los trámites administrativos, más complicados de lo deseable, para la implantación de empresas y sus filiales. “Un trato más dinámico con las Administraciones Públicas en lo que se refiere a registros, permisos, etc. facilitaría el desarrollo normal de la actividad”.

“Observamos también condiciones más duras y onerosas que en otros países en relación con a los pliegos de licitación y los contratos que en ellos se proponen, con un reparto de riesgos muy exigente en cuanto a nuestras responsabilidades como contratista. Y existe en ocasiones dificultad para acogerse a legislación internacional, arbitrajes en lugar neutral, etc.”

“Por otra parte, los procesos de licitación tienden a ser largos, con riesgo de relicitaciones y la incertidumbre que ello conlleva; incertidumbre que se extiende también a la política fiscal futura, lo cual es deseable que se regule claramente en las condiciones de licitación, sin concitar dudas en el caso de que haya cambios que, por otra parte, son previsibles en vista de la dificultad que tiene el Reino para cuadrar sus cuentas cuando el precio del petróleo es más bajo del previsto”.

TYPSA. Comenzó a trabajar en Arabia Saudí en 1979, cuando consiguió el contrato para el diseño y supervisión de la construcción de la nueva ciudad universitaria de la Universidad Islámica Al-Imam Muhammad Bin Saud, un proyecto de gran envergadura que abarca una extensión de 360 hectáreas de facultades, edificios administrativos, instalaciones deportivas, residencias para estudiantes y profesores, etc.

Desde entonces, su actividad se ha ido diversificando hacia distintos sectores. Entre los principales proyectos realizados se cuentan el diseño de las líneas 4, 5 y 6 del metro de Riad (en consorcio con otras empresas); la supervisión de la nueva red de suministro de agua, también de Riad; diversos proyectos para el nuevo desarrollo de NEOM, ciudad del tamaño de Bélgica que se está construyendo en el noroeste del país; y la supervisión de líneas férreas y de la construcción de ciudades universitarias.

En opinión de Pedro Gómez Prad, director general de Coordinación Internacional de TYPSA, sin duda la compañía ha sido elegida para todos estos proyectos “por nuestro fuerte compromiso con la calidad de los servicios que ofrecemos, la relación continuada y personal con los clientes, y la flexibilidad a la hora de entender sus problemas y resolverlos de manera satisfactoria”.

Aun así, el camino sigue sin ser fácil y la competencia es muy grande. “En cuestión de precios, cada vez resulta más difícil competir con consultoras locales en un entorno en el que, con frecuencia, se prefiere la oferta más económica en detrimento de la calidad del servicio”, relata Gómez Prad.

El ejecutivo español señala también que “en la actualidad se están produciendo retrasos significativos en los pagos por parte de clientes públicos y privados. Es bien sabido que el Gobierno saudí siempre cumple con sus obligaciones de pago, pero no se puede ocultar que los retrasos pueden afectar seriamente a las empresas que no tengan suficiente músculo financiero”.

“Un inconveniente añadido es la consecución de información suficiente sobre nuevos proyectos. Además, en ocasiones, las dificultades presupuestarias hacen que nuevas oportunidades de negocio sean canceladas hasta nuevo aviso”.

Gómez Prad no se olvida del proceso de “saudización”. “Este programa de sustitución de la mano de obra extranjera por saudíes hace que las empresas de nuestro sector tengan un porcentaje elevado de nacionales de Arabia Saudí en sus filas. Antes, ese porcentaje se cubría para puestos básicamente administrativos. Ahora, el programa va a exigir que un 20% de los ingenieros de la firma sean saudíes, con la consiguiente reducción de ingenieros españoles. Esto puede suponer un problema para aquellas compañías que no tengan una gran capacidad de implantación o no estén preparadas para afrontar este nuevo reto”.

Como resulta evidente, la experiencia y las opiniones de los directivos españoles que acabamos de relatar deben servir de información de primera mano para aquellas otras empresas que tengan en mente introducirse en Arabia Saudí, un mercado difícil y complejo, sí, pero con posibilidades reales.
MANUEL JAVIER ARCE

Vídeos destacados

Panel on opportunities in the water sector in Saudi Arabia (junio 2021)

Panel on opportunities in the tourism sector in Saudi Arabia (junio 2021)

Charla-coloquio sobre la situación actual del mercado saudí y principales líneas estratégicas económicas y comerciales. Aspectos a tener en cuenta para el desarrollo de proyectos empresariales en el país (junio 2021)

El sector del turismo en Arabia Saudita (junio 2021)

Oportunidades del agua en Arabia Saudí; gestión, suministros e infraestructuras (noviembre 2020)

Documentación

Descargar Ficha País. Arabia Saudí

Guía de negocios. Arabia Saudí
Ed. Ofecomes Riad, junio 2021, 57 págs., en español

Informe Económico y Comercial. Arabia Saudita
Ed. Ofecomes Riad, mayo 2021, 57 págs., en español

Guía de País. Arabia Saudí
Ed. Ofecomes Riad, mayo 2021, 52 págs., en español

Simulador costes de establecimiento ICEX: Arabia Saudí

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